En polémico partido O'Higgins roba un punto en La Cisterna...
Luego de la dura derrota como local frente a la Unión Española en Rancagua, los celestes enfrentaron a Palestino en Santiago y rescataron un punto sobre la hora.
Para este encuentro, Marco Antonio Figueroa no realizó modificaciones para jugar contra los árabes. El fantasma le dio nuevamente la confianza a David Salazar y otra vez Renzo López no vio minutos.
Una tarde calurosa en La Cisterna que vino a opacar a un O’Higgins alicaído. El capo comenzó manejando el balón pero sin mayores luces, un juego monótono sin sorpresas. Palestino luego de los minutos iniciales controló el balón e hizo correr a los celestes. Los de Rancagua no lograban encontrar la pelota y los locales administraban el juego.
Una de las jugadas claves del partido fue a los 23 minutos donde Maximiliano Salas cayó en el área y el árbitro no cobró. Segunda polémica en dos partidos que traerá coletazos en el Monasterio.
Lucas Passerini uno de los más cuestionados por la fanaticada árabe marcó el 1-0. Recibió un balón de espalda al arco y con un giro extraordinario sacó un remate que se clavó en el ángulo. Pasaba a resucitar dentro de los hinchas hasta que en el segundo tiempo falló una jugaba increíble sin arquero.
En el segundo tiempo el trámite se emparejó. El ingreso de Sepúlveda y Osorio vino a darle un aire al capo y poblar el medio campo. La línea de tres parecía la solución. O’Higgins controló el balón e intentó meter un poco de intensidad, algo que no se vio en el primer tiempo.
Con el balón, los celestes administraron las acciones los primeros minutos, pero sin ideas claras. Las transiciones lentas no sorprendían al rival y toda acción de peligro pasaba por lo que podía hacer Maxi que durante todo el encuentro buscó marcar su gol. Salas fue uno de lo que más mostro ímpetud e hizo soñar a más de alguno. Incluso Maxi fue el que provocó la expulsión de Julián Fernández a los 89’.
Luego de la expulsión y con un hombre demás, se logró profundizar más. En la última jugada de partido, Maxi Salas, el más incisivo, asistió a Albert Acevedo, quien con un cabezazo marcó el 1-1 final.
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